Un año más Pilar Vera nos ha transportado, esta vez, hacia el más puro origen del flamenco, allí donde las primeras bailaoras lucían sus batas de baile de grandes vuelos (que no de gran volumen) en los tablaos flamencos.
Como vestidos estrellas vemos propuestas de talles altos, con lunares de mayor tamaño y en diferentes tonalidades saturadas, rematados en un amplio volante de capa. Y es que como ya llevamos viendo varios años, parece que será 2016 la temporada donde las faldas de ligeras, amplias y cómodas alcanzan su pleno esplendor.
En contraposición, a esta primera línea más innovadora, vemos propuestas florales, donde los escotes enmarcados, largos flecos y mini-volantitos que recorren la línea del escote, nos dejan una propuesta más sensual.
También vimos una flamenca de corte más clásico, donde las faldas están cubiertas de pequeños volantes así como las mangas, donde el mantoncillo colocado de la manera más tradicional, cobran la más pura esencia que Pilar Vera deja presente en todas sus colecciones. Otra colección a recordar en años venideros donde tradición y tendencias actuales se unen.